Es importante replantear nuestro sistema socio-económico para poner la vida, los cuidados, a las personas y al planeta en el centro.
La crisis económica de 2008 dejó en la estacada a millones de personas. Aprendamos de los errores de entonces: la COVID-19 ha evidenciado que las políticas públicas (sanidad, educación…) son imprescindibles y que los recortes que se hicieron entonces provocaron más desigualdad. La COVID-19 es una gran oportunidad para hacer cambios en profundidad.
En relación al PIB España recauda 4 puntos porcentuales menos que la media de la Unión Europea. Además, no lo hace de manera justa ya que el peso de la recaudación (83%) recae sobre las familias, mientras que las empresas solo contribuyen con el 11%. Las medidas que proponemos van encaminadas a gravar la riqueza, el capital y a las grandes empresas.